Con la llegada del invierno el Nebulizador se convierte en ese artefacto infaltable ante la presencia de afecciones respiratorias, tanto en adultos como en niños.

NEBULIZADOR3

La función del nebulizador es transformar una sustancia líquida en un aerosol de partículas muy pequeñas que al inhalarlas alcanzan las vías aéreas.

Existen dos tipos de nebulizadores: a pistón y ultrasónicos, que por las características de cada uno, se aconsejan para tratar diferentes patologías.

– Laringitis, bronquitis y asma

Para estas afecciones se recomienda  un nebulizador a pistón que libera micropartículas pequeñas que penetran en las vías respiratorias bajas y medias donde se hallan las ramificaciones más pequeñas de los bronquios.

– Rino sinusitis, rinitis alérgica y faringitis

En el caso de estas patologías se recomienda el uso de un nebulizador ultrasónico que emite vibraciones de alta frecuencia, generando ondas de ultrasonido sobre la solución y produciendo partículas de mayor tamaño que se perciben como una niebla. Las macropartículas se depositan en las vías aéreas superiores y ayudan a bajar la inflamación de la garganta, facilitando el paso del aire por la laringe.

 

 


Fuente: Aspen Salud